Hace 25 años la Clínica Comfamiliar abrió sus puertas, enfocándose inicialmente a la población materno-infantil, la cual en ese momento representaba un alto porcentaje de los afiliados a la Caja de Compensación.
La inauguración de la Institución se dio exactamente el 31 de julio de 1997, el cual tiempo después se convirtió en un ícono de ciudad y referencia regional en cuanto a la prestación de servicios de alta complejidad, ya que se ajustaba a las necesidades
de la región. Para el año 2002, la Clínica Comfamilar creó la Unidad Renal, en alianza estratégica con la Multinacional Fresenius Medical Care, dando inicio a una posibilidad para mejorar las condiciones de vida de la población en general.
En el año 2004, la Clínica Comfamiliar empezó a operar el servicio de Cardiología Invasiva mediante una alianza con Angiografía de Occidente, tiempo después con una inversión de 4.500 millones de pesos amplió su infraestructura, incorporó nueva tecnología, capacitó a sus colaboradores y vinculó a profesionales para el desarrollo de programas y así posicionarse como una Clínica de Cuarto Nivel.
En el 2006, se abrieron nuevos servicios como perinatología, neumología, cirugía de tórax, cirugía oncológica, cirugía pediátrica, entre otras. Además dicha ampliación permitió ampliar la Unidad de Cuidado Intensivo con nuevos cubículos; para el 2007 se realizó una alianza con Radiólogos Asociados S.A. con el fin de realizar procedimientos más especializados.
Por el crecimiento rápido de la ciudad, la Clínica Comfamiliar vio la necesidad de continuar ampliando sus espacios, construyendo un edificio nombrado como laTorre B, con más de 3.925 metros cuadrados, donde en ese momento se prestaron servicios de cardiología no invasiva, sala de quimioterapia, infectología y ampliación en camas. Además se generaron locaciones para oncología, cuidado intensivo, laboratorio clínico y la creación del área de urgencias para la atención a convenios.
Todas estas mejoras fueron pensadas para brindar una atención más oportuna, cumpliendo los valores de equidad, inclusión y responsabilidad.
Para el 2016 la clínica inició la operación de la Unidad de Cardiología Invasiva con la adquisición de un Angiógrafo, un equipo de última generación. Durante el 2017 se realizaron adecuaciones en la Clínica con la creación de la Unidad de Hemato-
Oncología, y la vinculación de nuevos especialistas enfocándose en los servicios de alta complejidad.
Por otra parte, desde la Unidad de Investigación y Docencia de Salud Comfamiliar, se diseñaron modelos de atención para la población con discapacidad del Eje Cafetero y con el objetivo de generar nuevos conocimientos en el año 2018 se desarrollaron diferentes proyectos de investigación y se obtuvieron alianzas estratégicas internacionales.
Se dio inicio a la prestación del servicio de hospitalización en casa en el año 2019, con el objetivo de disminuir las enfermedades intrahospitalarias y darle continuidad al tratamiento de los pacientes en sus hogares, en este año también se inició la prestación del servicio de resonancia magnética, mejorando de esta manera los tiempos de espera para la entrega de resultados y evitando el desplazamiento de los usuarios.
Ya en el año 2020 se dio una atención especial en salud con el Comité de Emergencia, el cual se encargó de dirigir y coordinar las actividades relacionadas con la Emergencia sanitaria Covid-19, acatando los lineamientos e instrucciones emitidas por el Gobierno Nacional y la Secretaría Departamental.
Para cerrar este trasegar de hitos históricos, en el 2022 la Clínica Comfamiliar presentó su nuevo lobby y ascensor, que pretende entregar a los usuarios una nueva imagen basada en el mejoramiento continuo de la prestación de servicios,
centrados en el respeto, la privacidad y los 7 ejes trazadores de acreditación.
CARISMA, promesa de valor Durante 25 años, la Clínica Comfamiliar se ha caracterizado por un crecimiento
relacionado con las necesidades del entorno y la región, el cual se ha visto reflejado en la parte institucional y sociedad misma, permitiendo a los risaraldenses tener una mejor calidad de vida, en este sentido, desde el año 2015 el equipo Salud
Comfamiliar emprendió un reto con pruebas y logros buscando la calidad de la atención fundamentada siempre en la humanización y paciente.
Para Salud Comfamiliar, la Acreditación en Salud no solo es una meta, sino parte de un proceso enfocado al mejoramiento continuo cargado de disciplina, estudio y trabajo en equipo. Fue así como el 28 de junio hasta el 1 de julio, la Clínica recibió la
visita de otorgamiento para Acreditación en salud, por parte del ente acreditador ICONTEC.
Las actividades realizadas en esta visita de acreditación consistieron en recorridos por las diferentes sedes y servicios de Salud Comfamiliar, además de las entrevistas a los pacientes trazados que se encontraban en el lugar y las entrevistas a los
Equipos de Autoevaluación, Equipos Primarios de Mejoramiento, Comité de Dirección y Equipo de Mejoramiento Institucional.
En este proceso Salud Comfamiliar, reafirmó el compromiso de sus colaboradores reconociendo sus fortalezas y oportunidades de mejora, ratificando que su propósito es servir a los pacientes con CARISMA (promesa de valor) y mejoramiento continuo, actualmente se está a la espera de la respuesta del ente acreditador ICONTEC.
Para finalizar, el proyecto estratégico en salud que se prevé para los años 2022- 2025 es “Región, bienestar con equidad” y se compone de 12 puntos que representarán a la región una salud con experiencia, carisma y costo per cápita como triple meta.